Saulo se cambió el nombre por el de Pablo. Y en la carta a los
Gálatas dice: "Cuando Aquél que me llamó por su gracia me envió a que lo
anunciara entre los que no conocían la verdadera religión, me fui a Arabia,
luego volví a Damasco y después de tres años subí a Jerusalén para conocer a
Pedro y a Santiago". Las Iglesias de Judea no me conocían pero decían: "El que
antes nos perseguía, ahora anuncia la buena noticia de la fe, que antes quería
destruir". Y glorificaban a Dios a causa de mí.